¿Qué es el flamenco?
¿Qué es el flamenco?
taranto en el tablao flamenco el palacio andaluz

¿Qué es el flamenco? Parece una pregunta con respuesta fácil, sin embargo, el flamenco para muchos es algo más que género musical. Aunque desde el punto de vista, digamos ‘formal’ y recurriendo al diccionario, se define como “dicho de una manifestación cultural o de su intérprete: de carácter popular andaluz y vinculado a menudo con el pueblo gitano”, el flamenco se erige como una de las manifestaciones artísticas más ricas, diversas y reconocidas del mundo.

Muchos factores han hecho posible que esto sea así hoy en día, es decir, que el arte flamenco se reconozca y admire internacionalmente. A lo largo de su historia, ha experimentado diferentes etapas hasta llegar a convertirse en una expresión artística que se aprecia y practica en todo el mundo.

El flamenco: cante, guitarra y baile

Tratando de concretar y responder a la pregunta con la que comenzábamos este post, digamos que el flamenco es un arte que se presenta en dos variantes: la música y el baile. Dentro de la música, cante y guitarra tienen un papel fundamental, aunque existen otros instrumentos de percusión como las castañuelas o el cajón, y acompañamientos como las palmas, que también suelen estar presentes en un espectáculo flamenco.

El baile es otro imprescindible de este arte, tal vez sea la parte más expresiva y llamativa para el público. No en vano, cuando el baile flamenco dio el salto a los antiguos cafés cantantes (origen de los actuales tablaos flamencos), la brillantez que otorgaban los bailaores y bailaoras sobre la tarima y la pasión que ponían en sus interpretaciones despertó la atención de los espectadores, consiguiendo robarle protagonismo al cante.

El baile es muy efusivo y cada parte del cuerpo se mueve de forma coordinada: los pies, las piernas, las caderas, el talle, los brazos, las manos, los dedos, los hombros, la cabeza… Un zapateado, un desplante, un remate, un vuelo de volantes o un quiebro despiertan emociones en un escenario porque es una expresión artística que, por suerte, sigue muy viva, gracias a espacios como los tablaos flamencos, que celebran actuaciones en directo.

El flamenco es un arte muy rico y complicado. Está compuesto por más de un medio centenar de palos flamencos, que son cada uno de los estilos del cante, es decir, las diferentes modalidades que existen y que se agrupan en función de su procedencia, métrica o si lleva acompañamiento de baile o guitarra, entre otras características.

La división tradicional distingue entre los cantes básicos, los fandangos y sus derivados y, por último, aquellos palos del flamenco que tienen influencias regionales o americanas.

Cada palo flamenco tiene una estructura, que contempla una parte fija y otra variable. La parte fija es la que permite al elenco de artistas ir a la vez o ‘al compás’, sobre todo, cuando actúan en grupo sobre un escenario. La variable hace referencia a la ‘improvisación’, una de las particularidades que posee este arte cargado de emoción. Es habitual que, sobre los elementos estructurales, los artistas pongan su sello personal durante su actuación. Responde a esa carga ‘sentimental’ que posee este arte.

Simplificando, los palos se podrían agrupar en dos grupos o estilos:

El Flamenco Jondo (hondo), que es digamos el que hace referencia a un estilo serio, que expresa sentimientos profundos y con referencias más trágicas. Son los palos cuya temática está vinculada con el amor, la pena, la muerte o el desengaño, y se baila con una expresión intimista.

Quizá es un estilo más difícil de entender para aquellos que no están iniciados en el flamenco. Martinete, minera, soleá, tiento o farruca son palos incluidos en esta categoría.

Por otro lado, el Flamenco Festero agrupa los palos más alegres de este arte. También son más populares y conocidos y suelen interpretase en las fiestas y celebraciones en Andalucía. Su temática gira en torno a sentimientos más animados y jocosos. Las sevillanas, la rumba, los tanguillos, las alegrías o las bulerías forman parte de este grupo de palos flamencos.

Teniendo en cuenta que estamos ante un arte muy rico, no todas las interpretaciones son fáciles de clasificar. Pero si hay algo que todos los estilos tienen en común es el sentimiento y la emoción que posee esta expresión artística.

Disfrutar de un espectáculo flamenco en directo en Sevilla

El origen del flamenco se sitúa en la región andaluza, lo que hace que Sevilla sea una de las cunas del flamenco en Andalucía, un arte que se ha convertido en un atractivo cultural en esta ciudad, salpicada de tablaos flamencos que mantienen vivo el espíritu de este arte universal.

Si visitas la capital andaluza aprovecha su estancia para ver en directo un espectáculo flamenco en Sevilla, una experiencia muy recomendable para disfrutar de la fuerza, el talento, el arte y el duende de un baile, un cante y una guitarra.

El Palacio Andaluz es un tablao referente en la capital hispalense. Todos los días celebra dos espectáculos, a las 19:00 y 21:30 h, que se pueden ver mientras se degusta una cena. Sigue nuestra recomendación y no te pierdas un show flamenco en vivo. Puedes hacer tu reserva online para elegir el día y hora que mejor se ajuste a tus preferencias.

Si visitas Sevilla, no lo dudes, acércate a un arte universal como este. Solo así entenderás qué es el flamenco y por qué se ha convertido en un arte tan reconocido en el mundo. ¡Reserva tu entrada online!